Instalarse en Malasia significa adoptar un estilo de vida único, que combina modernidad y tradición. Para los expatriados, protegerse frente a los imprevistos médicos es esencial. Contar con un seguro de salud adaptado a las propias necesidades es la clave para disfrutar de una vida tranquila en este país del Sudeste Asiático.
El sistema de seguro de salud en Malasia
El sistema sanitario malasio se basa en dos pilares: público y privado. Aunque los hospitales públicos están abiertos a los expatriados, la mayoría prefiere el sector privado por la calidad de la atención y los tiempos de espera más cortos.
Los centros privados suelen estar bien equipados y ofrecer estándares comparables a los de los países occidentales. Sin embargo, los costes pueden ser elevados, por lo que resulta fundamental contratar un seguro de salud adecuado.
Dato útil: Los hospitales públicos están principalmente financiados por el gobierno, lo que explica su bajo coste. No obstante, las largas esperas y la posible barrera del idioma pueden dificultar la experiencia de los expatriados.
Los expatriados en Malasia disponen de dos opciones principales: un seguro de salud local o un seguro de salud internacional.
Seguro de salud local: Las aseguradoras locales suelen cubrir los gastos médicos en hospitales privados dentro del país. Son más económicas que las internacionales, pero su cobertura se limita normalmente al territorio malasio.
Seguro de salud internacional: Ideal para quienes viajan con frecuencia o desean tener acceso a la atención médica en varios países. Ofrece una cobertura más amplia, tanto en Malasia como en el extranjero, e incluye opciones adicionales como la repatriación o tratamientos en hospitales de alto nivel.
Dato útil: En caso de tener un seguro internacional, comprobar que los hospitales privados en Malasia estén incluidos en la red y que la cobertura sea suficiente para una posible repatriación.