Con sus paisajes impresionantes, su rica cultura y su costo de vida asequible, Ecuador atrae cada año a numerosos expatriados que buscan aventura o una jubilación tranquila. Sin embargo, una buena preparación es esencial para aprovechar al máximo la estancia. Entre las prioridades, contar con un seguro de salud adecuado en Ecuador resulta fundamental para garantizar una atención médica de calidad ante cualquier imprevisto.
El sistema de salud en Ecuador
El sistema sanitario ecuatoriano se compone de un sector público y otro privado, con diferencias notables entre las zonas urbanas y rurales.
El Ministerio de Salud Pública ofrece servicios básicos gratuitos o de bajo costo en los hospitales públicos, aunque estos centros suelen estar saturados y no siempre disponen de los recursos necesarios para tratamientos especializados.
Además, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) cubre a determinados trabajadores y sus familias, pero el acceso puede ser limitado y la calidad varía según la región. Por ello, muchos expatriados optan por el sector privado, que ofrece atención médica de mayor nivel, aunque con costes más elevados.
A la hora de contratar un seguro de salud como expatriado, existen dos opciones principales: un seguro local o una cobertura internacional.
Los seguros locales pueden resultar atractivos por sus tarifas más bajas, pero suelen tener limitaciones en tratamientos especializados o en coberturas fuera del país.
En cambio, los seguros internacionales, como los de APRIL International, están diseñados para responder a las necesidades globales de los expatriados. Permiten acceder a servicios médicos de calidad tanto en Ecuador como en el resto del mundo, una ventaja clave para quienes viajan con frecuencia.
Dato útil: algunos seguros internacionales incluyen cobertura por repatriación y acceso a especialistas, un beneficio importante para quienes requieren atención médica específica.